Dudas por el Cenard y temor en clubes de barrio por avances inmobiliarios
La decisión de eliminar la Secretaría de Deportes despertó temor en diferentes entidades deportivas; diversos sectores enfocados al «deporte social» temen ser los más afectados
A primera hora del martes se conoció en el Boletín Oficial que el Gobierno Nacional decidió eliminar la Secretaría de Deportes a través de un DNU y crear la «Agencia del Deporte». El documento marca la derogación de, al menos, cinco leyes votadas por el Congreso, el otorgamiento a este ente de poder vender terrenos del Estado y la quita de personería para la Confederación Argentina de Deporte.
El documento diagramado entre (el ahora ex) secretario de Deporte, Diógenes de Urquiza y el asesor presidencial en términos deportivos -exgerenciador de Racing-, Fernando Marín despertó cientos de críticas. La principal es porque ratificó la posibilidad de que el nuevo «Ente» venda tierras pertenecientes al Estado y, por otro lado, porque no hace referencia de ningún tipo al deporte social y solo está enmarcado en el «Alto rendimiento».
El artículo 5° del documento indicó que «posee plena capacidad jurídica para actuar en los ámbitos del derecho público y privado y su patrimonio estará constituido por los bienes que se le transfieran en asignación». Entre las facultades están: «las ventas, locaciones u otras formas de contratación de sus bienes muebles y servicios».
Entre las tierras afectadas están 700 y 1000 hectáreas en tierras fiscales ubicadas en la Ciudad de Buenos y en los municipios de Ezeiza y Esteban Echeverría. Los principales terrenos que están en disputa son las 11,5 hectáreas del Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo (Cenard), ubicado en pleno barrio de Núñez.
La preocupación por su venta crece porque en 2018 se vendieron tierras linderas pertenecientes al Tiro Federal y, ahora, desde ciertos sectores se impulsa por un cambio lugar del estadio Monumental de River, justamente, para que estas tierras libres. Al respecto, el mítico jugador de vóley, Marcos Milinkovic indicó: «Una locura lo que pretenden hacer Mauricio Macri, Diógenes de Urquiza y Gerardo Werthein. Quieren vender todo lo que nos pertenece».
Sobre este tema, Carlos Castagnetto, diputados del Frente para la victoria y perteneciente a la comisión de deportes de la Cámara, indicó: «Yo esto lo veo con mucho dolor. Porque el Cenard es histórico. Me duele como deportista y esta medida solo apunta a una idea de Alto Rendimiento» y agregó que «esto ahora tiene que pasar a una bicameral para que sea juzgada».
El DNU, además, le saca la personería jurídica a la Confederación Argentina de Deportes, una institución histórica que le ha dado un paraguas a los diferentes deportes federados y que funciona como protección del deporte social con clubes de barrios incluidos. Sobre esta situación, Cristian Font –presidente del Observatorio social y económico de los clubes de barrio- sostuvo que «es un avance inmobiliario para asfixiar a las institucionales barriales. Ya vivimos situaciones así con los tarifazos. Nos asfixian y después se acercan para concesiones».
Actualmente hay 20 clubes en Argentina. De los cuales 10 mil tienen deudas mayores a 300 mil pesos producto de las boletas de servicios. Al respecto indicó: «La desprotección existe, están sacando leyes que nos protegen y que habían sido votadas. No queremos otra ‘Luna de Avellaneda’ porque atrás de este decreto está la búsqueda de un marco jurídico para que desde el sector privado se puedan meter en los clubes». La ley a la que hace referencia es la creación de las «sociedad anónimas deportivas» que fue impulsada a mediados de 2018, justamente, por uno de los diagramadores del DNU, Fernando Marín pero que no tuvo apoyo.
Otro cambio es que, en la resolución presentada en el Boletín Oficial, se marca que la Agencia de Deportes deja de estar bajo la órbita del Ministerio de Desarrollo Social. Castagnetto, sobre este tema, indicó: «El deporte es una política de Estado. Que debe ser social. De esta forma, solo van a poder hacer Alto Rendimiento los que tienen dinero para costearlo».